15 de abril, 2019
Las compras de vivienda de los británicos en España caen un 26% desde 2017 por el efecto del Brexit
La recuperación del sector inmobiliario español es una realidad innegable tras el estallido de la burbuja en 2008 y más de un lustro de crisis. Volumen de inversión, precios, demanda, todos los indicadores están en positivo desde 2013, año en el que el sector tocó fondo. Cuando las alarmas de nueva burbuja ya han empezado a detonarse, un informe publicado este jueves por el Banco de España, titulado ‘Evolución reciente del mercado de la vivienda en España” constata que, la recuperación es muy heterogénea, pero que en términos agregados los máximos de antes de la crisis todavía están lejos.En 2018, las transacciones de vivienda cerradas ascendieron a 550.000. Esto es un 10% superior a las de 2017, y el nivel máximo en cinco años. Aún así todavía están lejos, un 37% por debajo, de las 885.000 que se registraron de media anual en el periodo 2004-2007. La inversión en vivienda alcanzó en 2018, niveles próximos al 5,5 % del PIB. Este nivel está en línea con los países europeos y lejano al 12% que se había registrado antes de la crisis, según apunta el informe. Por otra parte, el resto de la inversión en construcción ha pasado de suponer un 9,4 % del PIB en 2006 a un 5,1 % en 2018, tras una década de caídas.
Aún así, la recuperación del sector va muy por delante de la evolución económica. La inversión real en vivienda acumulada entre el cuarto trimestre de 2013 y el cuarto trimestre de 2018 se incrementó un 45%, mientras que en ese período el PIB creció un 15%.
Pero la recuperación no es igual para todos. En cuestión de precios, la tendencia es claramente alcista en todo el territorio, pero mientras en las dos comunidades más dinámicas Madrid y Cataluña han subido un 49% y un 39% respectivamente, en Extremadura y Castilla-La Mancha esa recuperación apenas ha registrado un incremento del 8%.
Más allá de esas dos grandes zonas, la costa mediterránea y las isla ha sido las otras zonas en la que más se ha notado la recuperación. Y en esto, tiene especial influencia los compradores extranjeros. En 2018, coparon el 16% de las transacciones, mientras que entre 2007 y 2013 representaban el 10% del mercado.
En 2018, las transacciones de vivienda cerradas ascendieron a 550.000. Esto es un 10% superior a las de 2017, y el nivel máximo en cinco años. Aún así todavía están lejos, un 37% por debajo, de las 885.000 que se registraron de media anual en el periodo 2004-2007. La inversión en vivienda alcanzó en 2018, niveles próximos al 5,5 % del PIB. Este nivel está en línea con los países europeos y lejano al 12% que se había registrado antes de la crisis, según apunta el informe. Por otra parte, el resto de la inversión en construcción ha pasado de suponer un 9,4 % del PIB en 2006 a un 5,1 % en 2018, tras una década de caídas.
Los precios subieron un 49% en Madrid, pero un 8% en Extremadura. Aún así, la recuperación del sector va muy por delante de la evolución económica. La inversión real en vivienda acumulada entre el cuarto trimestre de 2013 y el cuarto trimestre de 2018 se incrementó un 45%, mientras que en ese período el PIB creció un 15%.
Pero la recuperación no es igual para todos. En cuestión de precios, la tendencia es claramente alcista en todo el territorio, pero mientras en las dos comunidades más dinámicas Madrid y Catalunya han subido un 49% y un 39% respectivamente, en Extremadura y Castilla-La Mancha esa recuperación apenas ha registrado un incremento del 8%.
Incremento de los precios de la vivienda desde el mínimo marcado en la crisis. (Banco de España)
Más allá de esas dos grandes zonas, la costa mediterránea y las isla ha sido las otras zonas en la que más se ha notado la recuperación. Y en esto, tiene especial influencia los compradores extranjeros. En 2018, coparon el 16% de las transacciones, mientras que entre 2007 y 2013 representaban el 10% del mercado.
Los británicos siguen siendo los más dinámicos a la hora de adquirir propiedades en España, pese a que el Brexit está haciendo mella. En el 2018, representaron el 14% de las transacciones mientras que durante el período 2008 y 2016, su presencia era del 19%. Les siguen, de lejos, franceses y alemanes (8% cada grupo) y rumanos y marroquíes (7%, cada grupo).
Fuente: La Vanguardia